Tener un sueño de calidad influye positivamente en la salud física y mental.
Por el contrario, cuando somos incapaces de disfrutar de un descanso reparador, padecemos las terribles consecuencias al día siguiente. Nuestras capacidades físicas y psíquicas resultan mermadas y el humor, gravemente alterado.
En ese sentido, conviene conocer todas las fases del sueño. Particularmente, es interesante analizar la fase Rem del sueño (Rapid Eye Movement) también conocida como Mor en castellano (movimientos oculares rápidos).
¡Allá vamos!
¿En qué consiste esta etapa?
La fase Rem del sueño es una de las etapas clave del ciclo ya que ayuda a almacenar los recuerdos importantes y a desechar la información que no es relevante. Así, los nuevos datos pasan a conservarse en la memoria a largo plazo. De esta manera, su característica principal es su alta actividad cerebral.
Asimismo, durante la fase Rem del sueño ocurre una elevada activación fisiológica, lo cual podría incrementar la frecuencia cardíaca, la respiración e incluso la presión arterial. A nivel físico, el cuerpo se mantiene completamente inmóvil mientras se producen movimientos veloces y continuados de los ojos.
Se trata de la última fase del sueño en la que ocurren los sueños y las pesadillas después de la etapa de sueño profundo. A través de ella, además recibimos información del exterior de forma inconsciente. Aparentemente, dicha fase ocupa un 25% de nuestro ciclo del sueño aunque su duración e intensidad disminuyen con el paso del tiempo.
Cómo acceder a ella
Existen una serie de hábitos que puedes desarrollar en tu día a día para alcanzar la fase Rem del sueño y beneficiarte de sus efectos positivos. ¡Toma nota!
- Lleva a cabo una buena higiene del sueño. Mantener hábitos saludables es una de las piedras angulares para conseguir el mejor descanso. Por eso, es necesario dormir las horas necesarias así como establecer una rutina al respecto.
- Elimina o disminuye las bebidas estimulantes. Las sustancias como el té o el café intervienen en el ciclo natural del sueño.
- Realiza deporte moderado. El ejercicio activa el cuerpo y por eso, no es conveniente practicarlo justo antes de ir a dormir. No obstante, el deporte ayuda a relajar el cuerpo y la mente favoreciendo el reposo.
- Emplea técnicas de relajación. El estrés es un gran aliado del insomnio. Así que para combatir esta condición y lograr alcanzar la fase Rem, es importante utilizar algunas estrategias. El mindfulness puede ayudarte a deshacerte de las preocupaciones para conciliar el sueño.
- Minimiza los ruidos y apaga los dispositivos electrónicos. Para maximizar el tiempo de descanso, es vital dejar a un lado aquellos objetos que pueden alterar los ritmos circadianos de este proceso. Las luces y los sonidos fuertes alejan de la paz mental requerida para el empeño.Como has podido comprobar, la fase Rem del sueño tiene una función determinante en el almacenamiento de recuerdos y experiencias. Además, está relacionada con el aprendizaje ya que ayuda a consolidar los conocimientos adquiridos. Por otro lado, según algunos estudios, incluso promueve el equilibrio emocional.
¡Saca provecho de sus ventajas!