Las enfermedades psicológicas son tan frecuentes como las físicas y, en muchos casos, son la consecuencia de problemas emocionales no resueltos. Sin embargo, beneficiándote de nuevos recursos y estrategias de afrontamiento es posible liberarse de las cargas que te impiden desarrollarte en el presente.
Conoce ahora los trastornos mentales que más frecuentemente se dan entre la población, y comprenderás que la enfermedad mental no es solo la realidad de unos pocos.
¿Listo para descubrir a qué podrías enfrentarte?
La soledad de los trastornos mentales
Obtener información sobre las condiciones mentales más comunes, sin duda, arrojará luz sobre tu estado actual y te ayudará a ver que no estás solo.
Aunque padecer ciertas enfermedades psicológicas podría hacerte pensar que nadie comprende por lo que estás pasando, hay un gran número de individuos ahí fuera experimentando en silencio la misma sintomatología que tú.
Por eso, atreverte a hablar de tu enfermedad mental con personas de confianza o en espacios seguros te descarga de tu dolor emocional permitiéndote desarrollar tu resiliencia. Además, contar con la empatía y comprensión de los demás es clave para no condenarte a una situación de aislamiento y evitación muy dolorosa.
Las enfermedades mentales que muchas personas padecen
Los trastornos de alimentación son problemas psicológicos que principalmente ocurren entre los adolescentes y los adultos jóvenes.
Condiciones como la anorexia y la bulimia causan verdaderos estragos físicos y emocionales, pudiendo incluso a acabar con tu vida. De ahí que resulte imperativo buscar ayuda y restablecer el sistema de creencias en relación a la nutrición y el estilo de vida.
Por otro lado, la depresión es una de las dolencias emocionales graves que más se sufre alrededor de todo el mundo. Una incapacidad de gestionar diferentes conflictos o heridas emocionales podría propiciar su aparición. Modificar la manera en que se concibe la vida y adoptar modelos de comunicación asertiva posibilita prevenir recaídas en el futuro.
Las fobias son también muy comunes y las hay de muchas clases. Algunas veces, se trata de patrones de comportamiento heredados o que ocurren a causa de algún trauma del pasado. La fobia social, la claustrofobia y la agorafobia son las que tienen una mayor incidencia.
Un trastorno del aprendizaje como el déficit de atención e hiperactividad sucede a una edad temprana, y puede tener unos efectos devastadores sobre el desarrollo del niño. Por esa razón, es importante detectarlo a tiempo. En la edad adulta, afecta a todas las áreas: la personal, laboral, emocional, social y de pareja imposibilitando el crecimiento del afectado.
Para resumir…
En definitiva, es necesario reconocer la existencia de enfermedades psicológicas que crean un profundo malestar. La mayoría de ellas van acompañadas de síntomas físicos que podrían transformar tu vida en una verdadera tortura. Y es que cuando la mente enferma, el cuerpo también sufre las consecuencias.
Así que decídete a encontrar un equilibrio entre ambas que te permita estar en plena armonía con tu energía para poder disfrutar de tu vida al máximo.
¡Y no dudes en pedir ayuda!